La economía española poco competitiva. Sin alternativas al ladrillo.

La apuesta de los Gobiernos por la Contrucción, el Turismo y el Consumo Interno ha echo que nuestra economía pierda competitividad día a día. Antiguamente esta pérdida continua de competitividad se resolvía con la devaluación de la peseta, de esta forma nuestros precios en el exterior eran más bajos y volvíamos a vender nuestros productos.

El problema es que ahora no tenemos ninguna peseta que devaluar y nuestros productos son poco competitivos porque no se ha invertido en mejorar su productividad por ejemplo con I+D. Es decir, no tenemos ninguna alternativa a vender pisos y sol, cuando la construcción y el consumo interno caigan por el descenso del crédito hipotecario lo pasaremos mal. Paro, menos comprar de pisos y logicamente bajada de los precios de la vivienda.

En el siguiente enlace hacen un balance de cuanto a sido esa pérdida de competitividad:
http://www.elconfidencial.com/economia/noticia.asp?id=6085&edicion=19/09/2006&pass=